Un correntino publicó un hilo en Twitter con consejos para sus comprovincianos que viajan a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba) y se hizo viral.
El autor de la publicación es Milton Roses, cuya cuenta en la red social del pajarito es @miltonroses. Durante el mediodía de este martes publicó: “Voy a ir dejando tips para los compatriotas correntinos que vengan a Caba”.
Hasta el momento, son 23 los consejos publicados, pero adelantó a EL LIBERTADOR que en los próximos días sumará más.
Los 22 consejos, son:
- Si entrás a un quiosco y hay una bolsa de biscochos abierta sobre el mostrador no te podés servir nomás. Parece que está mal visto.
- En las verdulerías tienen las frutas verduras envueltas en papel film porque la cáscara no parece ser suficiente acá. No rompas el papel film, pedile al verdulero.
- En algunas esquinas tienen rejas tipo corral. No saltes, tenés que ir hasta mitad de cuadra donde están pintadas unas líneas blancas.
- Si ves una franja verde pintada en la calle tené cuidado por hay gente andando en bicicleta. Es más probable que te atropelle una bici que un auto, porque los autos frenan en los semáforos.
- Si le decís «chamigo» al taxista te cobran una tarifa preferencial. Es más cara que la común.
- En las panaderías tienen un coso que se llama «Pan de queso» que parece chipá, pero no es chipá. Eviten comerlo a toda costa, se van a poner tristes.
- Los porteños pronuncian un montón de consonantes. No se asusten. El castellano es así, en realidad.
- Algunas cuadras son muy largas y otras muy cortitas. Es un misterio cuántos kilómetros son, en realidad, 20 cuadras.
- Los mozos te van a decir «Dale», pero nunca te aclaran dale qué. No preguntes.
- Tratá de no quedarte mucho tiempo quieto en algún lugar o se va a armar una fila.
- Los «Bosques» de Palermo son una plaza grande. No necesitás llevar carpa.
- Si un autóctono te dice que algo «Queda acá cerca» no lo tomes literalmente. Nada queda cerca de nada acá. El quiosco de la esquina queda a 3 cuadras.
- Los autóctonos dan un sólo beso. No tires la mejilla para el segundo, vas a queda cabeceando el aire o, en su defecto, la frente de la otra persona, todo depende de para dónde se mueva.
- Es común que los hombres te saluden con un beso, incluso, a veces, un abrazo. No tengas miedo, no es que te quieran robar. Bueno, depende, si te quiere abrazar alguien que no sabés quién es capaz sí te quiere robar. Es contextual.
- A los que vengan en invierno: si un autóctono te dice que a la noche va a hacer frío, significa que va a hacer mucho frío. Por el contrario, si te dice que «va a estar lindo», significa que va a hacer mucho frío.
- Los porteños desconocen palabras importantes del castellano como Nio, Peina, Catú, Angá, Nae, Angaú y Ñembotavy. Con ellos tenés que hablar un castellano más básico.
- La mayoría de los porteños no tiene un chamamé favorito. No intentes sacar conversación por ahí.
- En las pizzerías de acá no hacen pizza correntina. Me dijeron que sólo nosotros le decimos así, pero yo no creo que sea verdad. Todas las otras variedades clásicas sí tienen.
- Si venís en auto tené presente que hay muchas calles en ese. En esas calles tiene prioridad de paso el que le tiene menos miedo a la muerte.
- IMPORTANTE: acá, «siesta» es dormir un lapso de tiempo breve en cualquier horario, no la franja del día que va de las 13 a las 16. No uses «la siesta» como una referencia temporal objetiva, vas a generar confusión.
- Otra complicación temporal. Para algunos porteños «la tardecita» es «temprano a la tarde» y no el atardecer. Lo mejor es decir horas específicas porque no saben dividir el día en sus partes correctas.
- El porteño encuentra la tonada litoraleña un poco dulce, si a eso le sumás que la mayoría piensa que somos ingenuos tenés terreno fértil para delinquir.
- Ciudad de Buenos Aires es el último lugar del planeta donde todavía puede verse al perro pequinés en su hábitat natural: el regazo de una señora paqueta. Si te cruzás alguno de estos individuos no intentes acariciarlo porque muerde. Los perritos también.
Milton contó a este medio que llegó a Caba el lunes para conocer a su primer sobrino, que nació hace un mes, y aprovechó el viaje para visitar a dos amigos que conoció a través de Twitter, Juan Cruz y Juan, que también son participes de los tips.
“Juan, que es de Córdoba Capital, y yo siempre tenemos una especie de discusión en broma con Juan Cruz, que es el porteño, jugando con la dicotomía de la civilización y la barbarie, y los unitarios y los federales; todo en tono muy en chiste. Con ellos es que nace esta idea de, cada vez que nos juntamos, hacer chistes como si en realidad nosotros estuviésemos viniendo desde el siglo XV, desde la Edad Media, a la civilización moderna. Muchos de estos tweets que están en el hilo son chistes internos dentro de nuestro grupo que van surgiendo a partir de las cosas que vamos notando acá, en Caba”, explicó Milton.