A raíz de su avance, la viruela símica volvió a ser noticia tras ser declarada como un evento de salud pública de importancia internacional por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Ante este acontecimiento, en la Argentina se decidió por controlar y reforzar la vigilancia epidemiológica en las zonas fronterizas. Asimismo, en Corrientes señalaron que las personas deberán seguir las directivas de la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública.
En diálogo con EL LIBERTADOR, el reconocido infectólogo provincial, Fernando Achinelli explicó que cuando «una persona que consulte por fiebre, lesiones en la piel, dolor de garganta, ganglios en el cuerpo y lesiones genitales, de personas que hayan viajado a zonas donde hay transmisión del virus, se pone la alerta, ahí se hace la consulta al sistema de salud, se toma la muestra, se aísla a ese paciente sospechoso por 21 días hasta poder tener el diagnóstico y certeza si es o no viruela símica».
Se recuerda que, el llamado de alerta de la OMS tiene lugar luego de la identificación de una nueva variante del virus Mpox, clado 1b en África.
BROTE EPIDÉMICO
Respecto a la declaración de emergencia sanitaria global, el especialista relató que «la viruela símica o Mpox, como se conoce, son una zoonosis que tiene como reservorio a los monos en una zona del África». Añadiendo que «ya tenía otros brotes epidémicos anteriormente, en los años 70 y el último recientemente en 2022. Y la declaración de la emergencia actualmente se da porque hay un nuevo clado o linaje de este Mpox en la República del Congo, que es el 1b que está afectando a menores de 15 años y en general a personas heterosexuales, distinto a lo que ocurría en 2022».
Achinelli sostuvo que la declaración es importante para lograr contener la infección y que no se disemine al resto del mundo. «Se que hay tres países contagiados, es Suecia, Finlandia y Turquía, son países que ya confirmaron la presencia de Mpox con esta nueva cepa. Así que bueno, todos los esfuerzos son para poder contener y que todos los países trabajen coordinadamente para la contención del virus», dijo.
¿Cómo se transmite y qué síntomas se presentan?
La viruela símica se transmite «básicamente contacto estrecho, por las vesículas, por la piel contacto con ese líquido, con esas vesículas, relaciones sexuales no protegidas, el contacto de mucosas», detalló el infectólogo, Fernando Achinelli.
«Y si bien, la transmisión aérea es poco eficaz, se puede transmitir también a igual que el Covid-19 con gotitas de la respiración, pero que tiene que estar muchas horas con la persona contagiada», informó.
Desde la página oficial del Ministerio de Salud de la Nación, avisaron que, a su vez, podría darse con «una persona gestante cursando la infección puede transmitirla al feto desde la placenta, y durante o después del nacimiento a través del contacto piel con piel».
Agregando que «en el brote actual la gran mayoría de los casos ocurren en hombres que tienen sexo con otros hombres, aunque cualquier persona puede adquirir la enfermedad sin importar su identidad de género o su orientación sexual. La transmisión durante las relaciones sexuales puede ocurrir, aunque no exista penetración o se use preservativo. Aunque éste es muy efectivo para prevenir el VIH y otras infecciones de transmisión sexual, su rol para evitar la transmisión de la viruela símica es muy limitado».
No obstante, respecto a los síntomas, el organismo nacional explicó que se caracteriza por las lesiones en la piel o mucosas. «Estas lesiones pueden ser manchas rosadas planas o sobreelevadas, úlceras, ampollas o costras y generalmente producen dolor que puede ser intenso».
Asimismo, señalaron que «las lesiones pueden ser pocas o muchas y ubicarse en la piel o mucosas de cualquier parte del cuerpo, y son frecuentes en la región genital o anal. También puede presentarse sin lesiones en la piel (por ejemplo, como inflamación aislada de la garganta o el recto)».
Además, suele causar fiebre, cansancio, dolor muscular o de cabeza, inflamación de los ganglios y dolor en la región genital, el ano o el recto. Y es muy frecuente la coinfección con otras infecciones de transmisión sexual. «Las personas con inmunidad disminuida tienen mayor riesgo de padecer formas graves», advirtieron.
.